Los aires acondicionados tienen como principio usas la refrigeración para enfriar el interior de un ambiento o habitación, teniendo como premisa una destacada ley física que es: cuando un líquido se convierte en gas, mediante un proceso de conversión, este absorbe calor. Estos aparatos usan un sistema cerrado para que determinados componentes químicos se evaporen y condensen una y otra vez a fin de crear un ambiente fresco.
Es de este modo que logramos enfriar una habitación, ya que el gas refrigerante posee una temperatura menos que la de la habitación, el aire pasa a través del evaporador y mediante esto le roba el calor al gas consiguiendo refrescar la habitación en la que nos encontremos.
Luego de este calor que le hemos robado a la habitación, con el uso del gas refrigerante, este es absorbido por el compresor, que sirve para refrigerar el mismo ya que el gas cuando retorna aun llega frio. Este proceso se repite hasta que se llegue a la temperatura deseada en la habitación. Una vez que esto ocurra la maquina se detendrá hasta que vuelva a subir la temperatura del lugar otra vez.
Funcionamiento del aire acondicionado.
Algunos de los componentes involucrados en el funcionamientos de los distintos aires acondicionados son: los refrigerantes, que son los que cuentan con la capacidad de cambiar a temperaturas considerablemente bajas, los ventiladores, que se encargan de movilizar el aire caliente que se encuentra en el interior hacia las bobinas llenas de refrigerantes. Los aires acondicionados tal como nos explican desde zyzclima.com cuentan con un sistema para canalizar el aire desde las bobinas hasta el refrigerante.
Cuando el aire caliente fluye sobre el frio, las bobinas del evaporador disminuyen la presión y el gas refrigerante que se encuentra en su interior absorbe el calor a medida que este cambia de estado líquido a gaseoso. Para que el sistema funcione el aparato tiene que regresar el gas refrigerante a líquido, una y otra vez.
Ciclo de refrigeración.
La función del gas refrigerante en este ciclo es la reducir o mantener la temperatura de un ambiente por debajo de la temperatura del entorno exterior. Para poder lograr esto una parte fundamental de este proceso es extracción de calor del espacio en cuestión que se desea refrigerar y transferirlo a otro cuerpo cuya temperatura sea menor, que pasa por diversos estados o condiciones (gas refrigerante).
Como su denominación lo indica en este ciclo habrá unas condiciones iniciales para el gas refrigerante, pero todo el proceso hará que eventualmente este regrese a su estado inicial para iniciar el proceso de nuevo. Existen ciertas fases por las cuales pasa el gas refrigerante para su funcionamiento.
Al principio el gas refrigerante está en estado líquido en la unidad exterior y a altas presiones, como es necesario mandarlo a la unidad exterior, esto se hace a través de un elemento de expansión, con esto se logra reducir la presión y la temperatura del sistema del aire acondicionado, dejándolo en condiciones óptimas para la operación.